lunes, 19 de diciembre de 2011

La Historia del MIR

Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR)




El Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) es una organización política de izquierda en Chile fundada por Clotario Blest, Miguel Enríquez y Luis Vitale en 1965.
Nació con la vocación de ser la vanguardia marxista-leninista de la clase obrera y de las capas oprimidas de Chile y de buscar la emancipación nacional y social tal como dice la declaración de principios aprobada en el congreso fundacional realizado el 15 de agosto de 1965 en Santiago de Chile. Basados en estos principios y movidos por un análisis político social de corte marxista-leninista y en la convicción de la existencia y confrontación de las clases, desarrolló sus actuaciones en búsqueda de la derrota de la "clase explotadora" y la consecución de una sociedad sin clases.
Actualmente, luego de las diversas divisiones y partida de militantes a otros partidos durante los años 1990, la facción conducida por el dirigente Demetrio Hernández y posteriormente Mónica Quilodrán, es la única que ha mantenido una ininterrumpida actividad política, posicionándose como la principal facción a nivel nacional desde 1997 en adelante.


Historia Orígenes (1965-1970)

Se formó el 15 de agosto de 1965, a partir de un grupo de dirigentes estudiantiles de la Universidad de Concepción y algunas organizaciones marxistas y trotskistas. En su I Congreso fundacional, celebrado en Santiago, delegados de la Vanguardia Revolucionaria Marxista-Rebelde, del Partido Socialista Popular, el Partido Obrero Revolucionario, anarquistas del grupo Libertario, un sector del Partido Socialista Revolucionario y dirigentes sindicales agrupados en torno al líder sindical Clotario Blest y al historiador marxista ícono del movimiento obrero Luis Vitale, decidieron dar forma a la nueva organización.

La declaración de principios del congreso fundacional dice en su punto VII que:

El MIR rechaza la teoría de la "vía pacífica" porque desarma políticamente al proletariado y por resultar inaplicable, ya que la propia burguesía es la que resistirá, incluso con la dictadura totalitaria y la guerra civil, antes de entregar pacíficamente el poder. Reafirmamos el principio marxista-leninista de que el único camino para derrocar el régimen capitalista es la insurrección popular armada.

Respecto a la izquierda tradicional:

Las directivas burocráticas de los partidos tradicionales de la izquierda chilena defraudan las esperanzas de los trabajadores; en vez de luchar por el derrocamiento de la burguesía se limitan a plantear reformas al régimen capitalista, en el terreno de la colaboración de clases, engañan a los trabajadores con una danza electoral permanente, olvidando la acción directa y la tradición revolucionaria del proletariado chileno. Incluso, sostiene que se puede alcanzar el socialismo por la "vía pacífica y parlamentaria", como si alguna vez en la historia de las clases dominantes hubieran entregado voluntariamente el poder.

Y por último, la finalidad del MIR es:

...el derrocamiento del sistema capitalista y su reemplazo por un gobierno de obreros y campesinos, dirigidos por los órganos del poder proletario, cuya tarea será construir el socialismo y extinguir gradualmente el Estado hasta llegar a la sociedad sin clases.

En su II Congreso (1967), los elementos trotskistas se apartaron, al ganar posiciones el grupo de estudiantes provenientes de la Vanguardia Revolucionaria Marxista-Rebelde: Miguel Enríquez, Luciano Cruz y Bautista van Schouwen. En 1968, se integraron el GRAMA (Grupo Avanzada Marxista de Concepción) y las FAR (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Santiago).

 Durante gobierno de Salvador Allende y Gobierno Militar (1970-1990)

Al llegar al poder la Unidad Popular y Salvador Allende en 1970, su dirección determinó suspender cualquier tipo de acción armada, definir una postura crítica ante el gobierno y de apoyo a la movilización y organización social, a la vez que colocaron su incipiente estructura militar a disposición de la seguridad del recién electo Presidente. Al momento del golpe de estado, que llevó al poder a Augusto Pinochet en 1973, el grupo político fue proscrito y reprimido intensamente: centenares de sus dirigentes y militantes sufrieron la tortura, muerte o desaparición forzada, y hasta el día de hoy muchos de ellos permanecen en calidad de detenidos desaparecidos. De hecho, Miguel Enríquez, su Secretario General y máximo dirigente al momento del Golpe Militar, fue abatido en un enfrentamiento con las fuerzas de seguridad y represión política del régimen militar el 5 de octubre de 1974. En la dirección del Movimiento, lo sucedió Andrés Pascal Allende.
Durante la dictadura, la organización realizó múltiples esfuerzos con el objetivo declarado de producir la derrota política y militar de ésta, organizando acciones de carácter armadas y de organización y movilización social. Tuvo una importante presencia en la reconstrucción de un movimiento estudiantil universitario y secundario opositor, con la creación de la Unión Nacional de Estudiantes Democráticos, y posteriormente la Juventud Rebelde Miguel Enríquez. Su mayor presencia la obtuvo en el movimiento poblacional, por medio de la Organización de de Pobladores (ODEPO). Sus militantes participaron del movimiento de defensa de personas que sufrían la violación de sus derechos humanos, impulsando la creación del Comité de Defensa de los Derechos del Pueblo (CODEPU) Movimiento Democrático Popular, que reunía a las organizaciones antidictatoriales de izquierda. Para finales de los años setenta, el MIR tenía cerca de 3.000 miembros y simpatizantes. Uno de los momentos más dramáticos de la historia del MIR se vivió tras el intento de organizar una columna guerrillera en los sectores rurales, para los cual se trató de instalar un grupo de sus militantes guerrillero en la cordillera de Neltume, en la zona centro-sur del país, el que fue detectado y aniquilado por la Dictadura.

 La división y fraccionamiento del MIR (1986-1997)

En 1986, la organización sufrió una división. Se conformaron tres fracciones, una que declaraba privilegiar las formas armadas de lucha liderada por Hernán Aguiló, quien había sido dirigente del Frente de Trabajadores Revolucionarios, frente político del MIR entre los trabajadores durante la Unidad Popular. Otra por Nelson Gutiérrez que se sería denominada como "MIR político" por su rechazo a continuar el desarrollo de formas de lucha militares en el momento político que vivía el país. Y por último la encabezada por Andrés Pascal Allende la denominada corriente "histórica" que proponía continuar la acción política, combinando formas de lucha de masas con acciones armadas.
Los sectores encabezados por Aguiló y Pascal fueron sucumbiendo víctimas de los golpes policiales recibidos y como resultado de las labores de seguridad emprendidas por la Dictadura militar del General Pinochet, desapareciendo finalmente atomizados en pequeños grupos autónomos, cuya última expresión fue el denominado "MIR-EGP" (MIR Ejército Guerrillero del Pueblo), que logró extender su acción hasta iniciada la transmisión a la democracia. La mayoría de sus miembros serían encarcelados, desapareciendo como organización posteriormente. Por otra parte, el llamado "MIR Gutiérrez" o "MIR político", abandonó cualquier intento de impulsar formas armadas de lucha y trató de desarrollar una estrategia de inserción en el proceso de transición política que se abrió luego del plebiscito de 1988. Después de 1990, al retornar Chile a un régimen político democrático, esta fracción se disolvió y muchos de sus militantes y dirigentes abandonaron la acción política o se integraron a otros partidos de la izquierda chilena. Sin embargo, con anterioridad a ese desplazamiento, esta fracción cayó en una profunda crisis que derivó en un quiebre compuesto por tres grupos: Por un lado quienes postulaban emigrar al Partido Socialista bajo el argumento de que el MIR ya no tendría sentido con el fin de la Dictadura, por otro lado un grupo de direcciones regionales que fundó lo que se denominó Dirección Nacional Provisoria encabezada por Carlos Lafferte, Pedro Huerta, Luciano Véjar y Mauricio Chamorro, quienes postulaban la continuidad del partido y el proyecto revolucionario en un nuevo contexto político, generando las alianzas con otros grupos de izquierda que dieron forma en 1991 al Movimiento de Izquierda Democrático Allendista (MIDA), y por último un grupo de militantes encabezado por el dirigente Demetrio Hernández.
El grupo liderado por Demetrio Hernández es finalmente, el único que hoy tiene presencia en la vida política nacional de lo que fue el MIR histórico, Su presencia y actividad política se ha extendido sustentada por militantes medios y de base quienes justifican su permanencia señalando que "el partido no se disuelve por decreto; es una necesidad de los pueblos de Chile".

 BY Nikola Tesla







3 comentarios:

  1. El romanticismo evoca mi conciencia y mi subconciente idealista me lasera el alma al no poder tocar la batalla que no fue.

    CHICO MARIO CONCEPCION
    M.E.R.I

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  2. Mi mundo se ha quebrado...Veo con pena y se me parte el corazòn al ver como cada dia se aleja mas el despertar del dormido social....El Capital, Guzman, Piñera y Compañia lograron cambiar el rumbo de la sinetica del poder popular con todas sus formas...Ahora ya no tengo derecho a soñar..Solo pesadillas me quedan y la realidad me permite sentirme agonicamente perdido.

    CHICO MARIO CONCEPCION
    M.E.R.I

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  3. Todavía algo se puede hacer, podemos despertar al pueblo, al obrero, a la dueña de casa aguerrida y luchadora, a los jóvenes con sus sueños y certezas

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